No todos los videojuegos de coches han de ser simuladores completamente fieles a las físicas de los coches ni a sus características. Como en cualquier película de acción muchas veces lo que queremos ver es espectaculo puro y duro, y eso es lo que tenemos con Split/Second Velocity. Explosiones, velocidad y destrucción, mucha destrucción, esto es lo que nos encontramos en este fantástico título de Disney que ha sido capaz de convencernos de que son mas que capaces de hacer títulos orientados a un público mas adulto.

Ya desde el comienzo del tutorial el juego nos dice que estamos metidos en un programa de televisión, y que si queremos formar parte de él deberemos esforzarnos al máximo. Con una buena dósis de reflejos sobreviviremos a los diferentes circuitos situados en entornos urbanos (aeropuertos, ciudades, almacenes...), y digo sobrevivir porque tanto los jugadores como nuestro entorno estará en nuestra contra, desde helicopteros que nos lanzan cargas explosivas, hasta aviones descontrolados intentando aterrizar en mitad de la carrera, deberemos esquivar todos esos obstaculos para llegar a la meta.

Jugar a Split/Second es como verse introducido en una producción de Jerry Bruckenheimer o una película de Michael Bay. Acción sin limites, adelantamientos imposibles  y explosiones espectaculares, todo ello a una velocidad de vertigo hacen de este juego uno de los titulos de coches mas cinematográficos de los ultimos tiempos.

Cada nueva fase del juego se presenta como una nueva temporada dentro del programa Split/Second, en el que descubriremos esos entornos urbanos. Cada temporada consta de varios capítulos, cada uno de ellos es una carrera que nos enfrenta a distintas modalidades. Las diferentes modalidades nos obligan a quedar en primer puesto, destruir al resto de participantes o sobrevivir a un helicoptero con muy mala leche que nos dispara misiles desde el cielo.

Para destruir a nuestros contrincantes hay un sistema muy original. Mientras hacemos derrapes, saltos imposibles o nos ponemos al rebufo de otros coches ganaremos energía. Esta energía sirve para llevar a cabo jugadas, que nos sirven para hacer nuestras jugadas. Éstas van desde activar eventos en el escenario cuando pasen coches "enemigos" cerca para acabar con ellos gracias a explosiones, derrumbes de edificios, maquinaria que empieza a funcionar sola... Aunque también es tremendamente útil cuando vamos en primera posición para abrir atajos que nos den aún mas ventaja sobre nuestros perseguidores.

Quizás el modo de un solo jugador puede resultar algo repetitivo, dado los escasos escenarios que dispone (12) o los pocos modos de juego que nos puede ofrecer. Pero la experiencia cambia completamente en el modo multijugador, que es donde realmente brilla el juego. Los modos de Carrera, Supervivencia y Eliminación para 8 jugadores es todo un añadido al videojuego, haciendo mucho mas divertido jugar con amigos que con una IA no especialmente brillante en el modo de un jugador.

Un apartado técnico digno de las superproducciones de Hollywood

Una de las mayores sorpresas que me he llevado es que para darnos una visión completa sobre el circuito y el escenario no tenemos engorrosos menus con la velocidad o nuestra posición en la carrera. En vez de eso tenemos unos pequeños hologramas en el faldón de nuestro coche con la información justa y necesaria. 

Las explosiones son increiblemente detalladas, manchando nuestra pantalla de barro y polvo cada vez que nos enfrentamos a uno de estos eventos, pero lo justo para no molestarnos demasiado en la conducción. Es increible que toda la carga poligonal del juego, el motor grafico lo lleve con una buena estabilidad y mantenga los 30 fps tan bien.

En el apartado sonoro aunque los efectos de las explosiones, los motores, choques, etc... son de lo mas variopinto la BSO es demasiado anodina, que cumple correctamente su función pero que pasa de lo más desapercibido en el videojuego. De hecho no soy capaz de recordar ninguna de las canciones del juego más allá del tema de los créditos.

Split/Second Velocity es todo un soplo de aire fresco dentro de los juegos de simulación. Es un juego adictivo, divertido y espectacular a partes iguales, un buen juego tanto como para los amantes del género como para los que somos un poco mas casuals en esto de los juegos de conducción. Disney ha hecho un estupendo trabajo y ha demostrado que es más que capaz de hacer juegos para un público más crecidito. Y con un alto nivel grafico. Esperemos que los rumores de que podía convertirse en franquicia sean ciertos, aunque de momento a esta primera parte Psicocine le da un: